Translate

lunes, 4 de junio de 2012

Android frente al resto. Android Vs Others

Una de las cosas que me han animado a escribir aquí sobre este tema es precisamente la pregunta que me hacen, y me siguen haciendo, muchos amigos: "voy a cambiar de teléfono/tablet, ¿qué me recomiendas, un Android o un iPhone? Bueno, pues como dice la canción, depende... ¿de qué depende?

Desde mi experiencia (he tenido y en este orden Symbian, Blackberry y Android, aunque también tengo acceso a un iOS). Obviamente con cada uno, en ese momento, siempre pensé que el que tenía era el mejor, pero he ahí la clave, la evolución de cada uno. Me centraré solo en los tres más importantes hoy en día del mercado, Blackberry, iOS (iPad y iPhone) y Android (a pesar de las deferentes versiones).

¿Cuál es el mejor? Ninguno es mejor, ni es peor (bueno, uno sí se diferencia en este sentido en mi modesta opinión). Mi respuesta es clara, aunque después especifico, tal y como hago en esta entrada: si lo vas a utilizar para negocios, cualquiera de los tres es bueno, pero si tu empresa tiene desarrollos específicos para aplicaciones internas que forman parte de su ERP para Blackberry, pues la respuesta es obvia... Por otro lado, ¿Android o iOS? Mi respuesta es siempre la misma, dependerá de qué nivel o perfil tecnológico (me atrevería a decir informático) que tengas. Si tienes un perfil informático, has programado o te gusta programar, o te gusta personalizar y controlar todo y trastear, tu equipo es sin duda android; si por el contrario hasta ahora tu teléfono móvil solo lo has usado para llamar por teléfono o enviar no a tu gusto algún que otro SMS, y la tecnología y tú no os soléis llevar del todo bien, tu equipo es iOS (iPhone, iPad), menos configurable y, por tanto más fácil de usar para el común de los mortales... eso sí, no esperes poder sacarle todo el partido que se le puede sacar a un equipo de gama alta por el que has pagado esa barbaridad.


Blackberry:

Empezó fuerte, pero en mi modestia opinión cometió un error imperdonable: no supieron evolucionar a la tendencia del mercado. Nació como una herramienta corporativa, dando erróneamente por hecho que la única herramienta tecnológica a nivel de comunicación para una empresa debía ser el email, y sobre éste diseñaron toda una serie de sistemas y aplicaciones, un equipo para poder leer tu email en cualquier sitio, diferenciándose del resto de la época como symbian en que las notificaciones se hacían a tiempo real, por push. Otra de las ventajas que tenía en aquel momento y actualmente es la red RIM, que permite mayor velocidad al comprimir todos los datos que se envían, con la desventaja de depender de sus servidores únicamente para dar servicio, algo que les llevó a pérdidas millonarias y, posibelmente, haya sido su tumba (recordemos las últimas caídas de la red y la evolución en las ventas desde ese momento).

Pero quizás hay algo que nadie ha reparado, y he aquí donde el error de Blackberry clama al cielo al no saber explotarlo y evolucionar: la nube. Sí, Blackberry, sin saberlo, fue el primero en hacer que el público utilizara el concepto de nube (por supuesto no como lo hace Google hoy con Android llevando los datos personales al cielo, sino mas bien al revés, bajando de la nube la información de interés laboral), permitiendo a las empresas clientes desarrollar aplicaciones que permitían disponer y modificar, no solo del email a tiempo real, sino cualquier información necesaria en tu trabajo, a través de módulos externos de la ERP de la empresa desarrollados para este sistema. Desgraciadamente para RIM este concepto de nube lo supieron explotar otros, con Google a la cabeza.

iOS:

Como dije antes, este OS es ideal para aquellos que no tienen un perfil tecnológico muy desarrollado, y que en su vida han programado, o han usado un PC contadas veces o solo para leer el correo y navegar por internet. Este es el éxito que ha tenido iPhone, precisamente la sencillez de uso, y lo que algunos vemos como desventaja, se convierte en una ventaja comercial, la robustez y la dificultad de personalización. No obstante esto no impide poder disfrutar de las más avanzadas tencnologías tanto para uso profesional, como para ocio y multimedia.

Ventajas: Sencillez, uso intuitivo, robustez de las aplicaciones, pantalla, duración de la batería.

Inconvenientes: El problema es la diversidad de teminales, que como todos sabemos solo podemos elegir entre tres iPhone y tres iPad. Tampoco me gusta el hecho de que la batería no se pueda extraer y cambiar por otra de reserva, aunque es cierto que estos terminales tienen buena gestión de batería como decía antes. No me gusta la gestión de multitarea que tiene (de hecho no tiene en aplicaciones, de ahí la buena duración de la batería), tampoco la navegaciónen cascada (aun no he encontrado un botón para ir a la pantalla, aplicación o estado anterior, tan solo el Home), aplicaciones muy cerradas y en general más caras que Android a igualdad de calidad, poca personalización del usuario, complejidad para hacer root (Jailbreak) y capacidad escasa para controlar y monitorear el estado del dispositivo (memoria, uso CPU, taréas y procesos abiertos, etc), carencia de widgets, pobre capacidad de sincronización y envío de archivos a otros dispositivos, etc.

Android:

Después de mi symbian Nokia N95 (por cierto la mejor cámara de fotos que he podido tener en un teléfono, más aun que mi actual Galaxy SII), me dieron en la empresa un Blackberry. Estupendo, email a tiempo real, todos los datos de proyectos, pedidos, financieros de la emrpesa a un click del teléfono, bastantes aplicaciones para descargarse aunque poco "vistosas", etc. Después me cambiaron de terminal, también Blackberry, y aquí empezamos con los problemas, la portabilidad de los datos personales de uno a otro terminal... dolor de cabeza. Más tarde cambié de empresa pero me compré antes un Blackberry personal al que le porté los datos (más dolor de cabeza), ya que es cierto lo que afirman los defensores de este SO, el que se ha acostumbrado a escribir a cierta velocidad en un BB, es dificil que le cambien a una pantalla táctil. En la empresa me dieron un Android, mi primer android, LG GW620 con Android 1.5 que lo elegí por el teclado físico al venir de Blackberry. Al principio bien, pero la juventud del OS de Google empezó a darme dolores de cabeza, y el terminal se convirtió en el peor ladrillo que  me han dado, y es que esa joven versión de Android estaba aun en pañales, con una pobre o escasa multitarea, y reducidos recursos de memoria y procesador, tanto es así que cuando me entraba una llamada en repetidas ocasiones era incapaz de contestarla con el botón verde porque la gestión de touchscreen se saturó y no reaccionaba, perdiendo siempre las llamadas y haciendo creer al llamante que no quería responderle. Posteriormente cambié a otro Android, un HTC también con teclado físico y con una versión ya más adolescente de Antroid (2.1 si no recuerdo mal) y fue cuando me enamoré del OS, en la portabilidad de los datos, y es que es tan sencillo como sacar la SIM y ponerla en otro Android, ya que todos y cada uno de los contactos, calendario y otros datos imprescindibles, lo bajas de la nube que Blackberry no supo explotar y que sí hizo Google, tan solo debías rescatar las fotos y los vídeos y eso es todo (algo que ya hoy en día por cierto tampoco es necesario con el avance de algunos servicios de nube como Dropbox, del que hablaré en alguna entrada futura). Fue así como llegué a Android y en Android me quedé, con nuevos terminales y versiones mucho más mejoradas.

Ventajas: todas, es decir, principalmente portabilidad e independencia del terminal (mas valorado aun si pierdes o te roban el terminal), sincronización con otros terminales y aplicaciones, gran cantidad de terminales disponibles de varias gamas a elegir, personalización y configuración suficientemente abierta (no olvidemos que es un OS abierto y que permite hacer de todo, mientras el hardware aguante), óptima gestión de la multitaréa, monitorización de los recursos del terminal, uso de widgets en la pantalla principal (aplicaciones sencillas que muestran alguna información breve en la pantalla de inicio, al igual que los gadgets de windows), etc. Resumiendo: portabilidad, sincronización y control del sistema.

Inconvenientes: Lo primero es que quizás no sea el OS ideal para aquellos que no les guste usar un teléfono más que para hablar o mandar sms, ya que se perderían y llegarían al punto de que llevarían el teléfono al servicio técnico diciendo que no les funciona, y en realidad es que tienen numerosas aplicaciones abiertas en segundo plano que no han sabido liberar de la memoria, y el teléfono se bloqueó, algo cada vez, por otro lado, más complicado con cada nueva versión (hasta la versión 2.2 de Froyo se hacía imprescindible tener instalado un killer de aplicaciones y procesos). El segundo inconveniente, aunque cada vez es menos problema, es la batería... en general en estos terminales se hace necesario llevar en el bolsillo una batería de repuesto para emergencias que pudieran surgir al final del día, aunque afortunadamente esto se puede hacer  porque se permite su extracción, al contrario que con los iPhone. En una entrada aparte comentaré trucos para ahorrar batería, tanto si se es root como si no (de esto del root también hablaré). Otro inconveniente podría ser la inestabilidad del OS Android frente a la de iOS, ya que según qué aplicaciones, y aun con la última versión ICS, podemos hacer bloquear y tener que resetear el teléfono, algo más fácil de conseguir si el usuario no tiene demasiados conocimientos informáticos.

Eso es todo lo que quería contar sobre uno y otro OS. Dejo abierto esto para enriquecer mi personal (y partidaria) comparativa con vuestros comentarios.

Un saludo,
Swin

No hay comentarios:

Publicar un comentario